Torre de Gediminas: En una colina de 48 metros, la Torre de Gediminas es el símbolo histórico de la ciudad y lo que queda del castillo que se elevaba en ese punto entre los siglos X y XIV. En su museo, multitud de tesoros arqueológicos narran la historia de la fundación de Vilna por el Gran Duque Gediminas de Lituania. Las vistas de los tejados del casco antiguo son impresionantes. Dirección: Arsenalo gatvė 5, 01143 Vilna, www.lnm.lt

Catedral de Vilna: Símbolo nacional del país y excelente ejemplo de arquitectura clasicista, la catedral de la ciudad se encuentra en el lugar donde existía un templo pagano de 1387, donde los lituanos adoraban al dios del trueno, Perkunas. En las catacumbas del templo encontrará un museo que narra su historia. Dirección: Katedros a. 2, 01143 Vilna, www.katedra.lt

Pinacoteca de Vilna: En el interior de un elegante palacio real del siglo XVII, la Pinacoteca de Vilna alberga la colección más grande y más importante de antiguas obras de pintura de Lituania. Su catálogo cuenta con más de 2.500 obras de los siglos XVI a XIX, con énfasis en los retratos y las hagiografías. Dirección: Didzioji gatvė 4, 01128 Vilna, www.ldm.lt

Museo Nacional de Lituania: El Museo Nacional de Lituania se encuentra en un impresionante palacio del siglo XV. La riqueza de los objetos en él expuestos constituyen un panorama de la vida cotidiana en Lituania desde el siglo XIII hasta la II Guerra Mundial. Dirección: Katedros aikštė 4, 01143 Vilna, www.valdovurumai.lt

Museo de las Víctimas del Genocidio: Dedicado a los miles de lituanos que fueron víctimas de la atrocidad soviética después de la II Guerra Mundial y hasta la década de 1960, este fascinante museo memorial se encuentra en la antigua sede de la KGB. Cuenta con testimonios personales de exiliados en Siberia y auténticas celdas subterráneas de confinamiento, tortura y ejecución de prisioneros, que hacen de la visita al museo una experiencia inolvidable. Dirección: Aukų gatvė 2, 01113 Vilna, www.genocid.lt

Museo del Ámbar: Toda la historia del ámbar, desde su elaboración hasta sus infinitas aplicaciones, se despliega de forma fascinante en este museo temático que muestra la gran importancia del «Oro del Báltico» para la economía y la tradición lituana. En él podrá ver, entre otras cosas, excelentes exposiciones de joyas de ámbar. Dirección: Šv Mykolo gatvė 8, 01124 Vilna, www.ambergallery.lt

República de Užupis: El barrio de Užupis no es solo la «Montmartre de Vilna» sino también un estado independiente con su propia constitución, su propia bandera, su himno y su presidente. La «República de Užupis» nació en 1998 de la comunidad artística de la ciudad, en un movimiento de auténtico humor revolucionario. Aquí late el corazón bohemio de Vilna en decenas de galerías de arte y talleres de artesanía. De hecho, Užupis significa creatividad y exclusividad.

Puerta de la Aurora: La única puerta del siglo XVI que se conserva de las diez puertas de entrada del Casco Antiguo es famosa principalmente por la milagrosa, según dicen, imagen de la Virgen María que se halla en la pequeña iglesia de su lado oriental. La imagen está considerada uno de los lugares de peregrinación más importantes de Europa del este. Dirección: Aušros Vartų gatvė 14, 01303 Vilna, www.ausrosvartai.lt

Casa Museo de Kazys Varnelis: La Casa Museo del famoso pintor lituano, ávido coleccionista de obras de arte y notorio bibliófilo, Kazys Varnelis, alberga obras del artista, además de su polifacética colección internacional de obras de pintura, mapas y libros. Entre ellas existen obras de Goya y Durero. Dirección: Didzioji gatvė 26, 01128 Vilna, www.lnt.lt

Iglesia de Santa Ana: Construida en el siglo XV con 33 diferentes tipos de ladrillos de arcilla pintados de rojo, esta diminuta iglesia gótica es, según aceptación general, la más bonita de Lituania. Dicen que Napoleón quedó tan fascinado cuando la vio que quiso llevársela consigo a Francia. Dirección: Maironio str. 8 – 1, Vilna, www.bernardinuansamblis.lt

El Casco Antiguo es la primera opción para realizar compras de artículos de calidad con color local. Los alrededores de la calle peatonal Didžioji Gatve y la adoquinada Pilies Gatve, con puestos de artículos de artesanía y obras de arte, son una parada obligada para quienes busquen tiendas elegantes y boutiques exclusivas de diseñadores locales. Podrá encontrar de todo, desde ropa y antigüedades hasta joyas, libros antiguos y cuadros. Lituania es famosa por su ámbar y sus tejidos de lino y en Vilna encontrará una gran variedad de tiendas especializadas con creaciones basadas en estos dos materiales. Para realizar compras más caras, puede dirigirse a la principal calle comercial de la ciudad, la avenida Gediminas. En ella encontrará el recientemente restaurando centro comercial GO9 con numerosas tiendas de moda. A las afueras de la ciudad, la famosa Akropolis combina interminables compras con atracciones de todo tipo, desde cine y bolera hasta pista de patinaje. Si desea degustar las delicias locales, deberá atravesar la puerta del mercado cubierto de comida Hales Market. Tras el bonito edificio de ladrillos de 1900 donde se encuentra el mercado encontrará una gran variedad de productos frescos, y entre ellos excelente miel de producción local. El mercado central al aire libre de la ciudad se llama Kalvariju Market y se llena de gente cada sábado. En él podrá encontrar de todo, desde ropa y discos antiguos hasta bicicletas y cámaras fotográficas.

La cocina lituana es una fusión de las cocinas escandinava y de Europa oriental con influencias de Occidente. La reina de los sabores nacionales y base de una imaginativa variedad de platos locales es la patata. Podrá encontrarla cocinada de multitud de formas, desde el cepelinai (grandes bolas de patata con forma de zeppelin rellenas con carne picada o queso cottage) y la ensalada de patata hasta diferentes tipos de pan de patata (kugelis), tortitas de patata cruda rallada y bolas de patata rellenas de setas o moras. El plato más exótico que podrá probar es el vėdarai (salchicha de patata asada en horno de leña). Los lituanos adoran también las sopas frías y, especialmente, la sopa fría de remolacha (šaltibarščiai). Acompáñela con kepta duona (pan de ajo frito). Si la cocina local no excita su paladar, no se desanime. Vilna cuenta con un gran número de restaurantes internacionales para realizar viajes gastronómicos desde el Mediterráneo hasta Japón y desde India a Brasil. La diversión nocturna en Vilna se mueve entre bares clásicos con música y discotecas. El epicentro de la acción es Vokieciu Gatve, donde se concentran la mayoría de los pubs de la ciudad. En verano, las calles se llenan de vida y la práctica habitual de la gente es ir de bar en bar. La mayoría de las discotecas de Vilna tienen carácter clásico, aunque los últimos años se ha puesto de moda el derecho de admisión que impone vestimenta y conducta adecuadas.

• Festival de Vilna: Solistas internacionales consolidados, grupos musicales y orquestas sinfónicas de todo el mundo comparten escenario en el mes de junio con artistas lituanos en uno de los festivales de música clásica más respetables de Lituania. El festival es además una importante plataforma de expresión de jazz, ópera y ballet.
• Festival Internacional de Teatro de Vilna – Sirenos: A principios de otoño, se celebra en Vilna uno de los principales festivales de teatro innovador europeo. Durante los diez años de su existencia en el mapa teatral mundial, este festival ha recibido a importantes nombres de las artes escénicas contemporáneas como Romeo Castellucci, Tadashi Suzuki, Jan Fabre, Krzysztof Warlikowski, Alvis Hermanis, Krystian Lupa, Rimini Protokoll, entre otros.
• Festival de Verano Christopher: El mayor evento musical de Lituania tiene una duración de dos meses (julio-agosto) y se celebra en Vilna y en otros lugares del país. El programa incluye 50 conciertos en primicia y destaca por su versatilidad. Podrá escuchar música clásica, jazz, músicas del mundo, proyectos experimentales y ciclos musicales de instrumentos tradicionales, piano y guitarra. ¿Por qué resulta innovador este festival? Porque muchos de sus eventos se celebran en lugares poco heterodoxos, como barcos de vapor, aerostatos, establos, etc.
• Vilnius Jazz: El festival de jazz más antiguo de Vilna (1987) explora en el mes de octubre todas las tendencias del jazz contemporáneo, juntando los mayores nombres de la escena jazzista internacional con importantes músicos de Lituania. Más de 7.000 espectadores disfrutan cada año de un programa vanguardista de conciertos, jam sessions y proyectos innovadores con la colaboración de artistas de la música académica, rock, étnica e industrial.

Transporte desde el aeropuerto a la ciudad

Aegean Airlines opera en el Aeropuerto Internacional de Vilna (VNO), 6 km al sur de la capital lituana. En el aeropuerto encontrará muchas tiendas libres de impuestos/travel value, restaurantes, cafeterías, bares, cajeros automáticos, oficinas de cambio, salas de juegos infantiles, dos hoteles y Wi-Fi gratuito. La forma más rápida de llegar al centro de la ciudad es con el tren directo que conecta la estación de ferrocarril del centro de Vilna, cerca del casco antiguo, con el aeropuerto (línea Stotis - Oro Uostas). Los trenes salen cada 40 minutos y el trayecto dura 8 minutos. También se puede utilizar el autobús urbano número 1, que conecta directamente la estación central de autobuses del centro de la ciudad con el aeropuerto cada 30-40 minutos. El trayecto dura 15-20 minutos.