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Océanopolis: Único en Europa y uno de los mayores parques de descubrimientos e investigaciones marinas del mundo, Océanopolis ofrece una apasionante visita al corazón de los océanos. Dividido en tres pabellones temáticos (polar, tropical y templado), con 64 acuarios y más de 10.000 animales marinos, constituye la principal atracción turística de Brest. Dirección: Port de Plaisance du Moulin Blanc, Brest, www.oceanopolis.com
Museo Nacional de la Marina: Repartido por tres torres medievales del castillo de Brest, el Museo Nacional de la Marina despliega la excepcional historia militar de la Marina de Francia a través de una rica colección. Aquí podrá contemplar raras cartas de navegación de época, maquetas de barcos vintage y soberbios cuadros de pintura de tema naval. Dirección: Château de Brest, Brest, www.musee-marine.fr
Museo de la Torre Tanguy: Construida en el siglo XIV, la imponente torre Tanguy ha sobrevivido al tiempo y la historia para convertirse en uno de los símbolos de la ciudad. Desde 1964 acoge el museo de la Vieja Brest, una reproducción de la ciudad como era antes de la II Guerra Mundial a través de maquetas y dioramas. Dirección: Square Pierre Péron, Brest
Conservatoire Botanique National De Brest: El Conservatorio Botánico Nacional de Brest fue creado en 1975 en un extenso terreno del valle de Stang-Alar, y es el segundo más grande de Europa. En sus invernaderos son protegidas más de 1.700 especies de plantas y árboles en peligro de extinción, en un impresionante oasis verde con hermosos senderos para pasear, jardines y un lago. Dirección: 52 allée du Bot, Brest
Musée des Beaux-Arts de Brest: El Museo de Bellas Artes de Brest ofrece a los amantes del arte un panorama excepcional de la pintura europea desde finales del siglo XVI hasta comienzos del siglo XX. Su colección comprende unas 300 obras, sobre todo de pintura naval de Bretaña y del relevante movimiento de la Escuela de Pont-Aven (1886-1895). Entre ellas, obras de Paul Gauguin y Émile Bernard. Dirección: 24 rue Traverse, Brest, www.musee-brest.com
Château de Brest: Construido sobre las ruinas de una fortaleza galorromana a orillas del río Penfeld, el imponente castillo de Brest cuenta con diecisiete siglos de historia y constituye un emblema histórico de la ciudad. Los impresionantes bastiones y murallas son obra del célebre ingeniero francés Vauban (siglo XVII). Desde aquí podrá gozar de una vista excepcional sobre el majestuoso puente levadizo Recouvrance y la rada de Brest. No deje de pasear por la verde Cours Dajot, a lo largo de los bastiones, para disfrutar de las espléndidas vistas a los puertos comercial y deportivo. Dirección: Château de Brest, Brest, www.musee-marine.fr
Recouvrance: Aunque la mayor parte de Brest quedó arrasada tras los bombardeos de la II Guerra Mundial, para ser reconstruida desde sus cimientos en la década de 1950, el atmosférico barrio Recouvrance del siglo XVII conserva parte del patrimonio arquitectónico de la ciudad. La mejor manera de descubrir sus seductores misterios es participar en las visitas guiadas organizadas de la asociación «Vivre la Rue», con paradas en la histórica Maison de la Fontaine y la pintoresca rue Saint-Malo, la calle empedrada más antigua de la ciudad.
Mémorial du fort Montbarey: Construida en el siglo XVIII por orden de Luis XVI, la histórica fortaleza Montbarey desempeñó un importante papel en el desarrollo del conflicto entre alemanes y americanos durante la ocupación de Brest. Hoy acoge el Museo de la Memoria de la II Guerra Mundial, con raros documentos y material sobre la acción de la resistencia por parte de los habitantes de la ciudad. Dirección: Allée Bir Hakeim, Brest
En la histórica avenida Rue de Siam –la principal calle comercial peatonalizada de Brest–, descubrirá una gran variedad de boutiques de ropa y accesorios con marcas famosas de diseñadores franceses y otras, establecimientos emblemáticos de Francia como Lafayette, joyerías y tiendas más especializadas en artículos de piel, sombreros o pañuelos de seda.
En el centro de Brest, vale también la pena explorar la zona en torno a la Place de la Liberté y la Rue Jean Jaurès. Aquí, entre los establecimientos franceses favoritos, como Printemps y los centros comerciales de moda como el Espace Jaurès, encontrará numerosas tiendas con artículos de hogar, extraordinarias bodegas y delicatessen, chocolaterías y liberías de cómics.
Si se cuenta entre los amantes de los deportes acuáticos, y especialmente de la vela, no deje de visitar algunas de las fabulosas tiendas de artículos navales de regalos y equipamiento que abundan en Brest.
Para ir a la caza de ocasiones en diversos artículos, desde ropa hasta artesanía y cerámica, deténgase en el mercado cubierto diario de Les Halles de Saint-Martin. Los gourmets incurables acudan al Les Halles Saint-Louis, el célebre mercado de alimentación de la ciudad, así como al mercadillo que se celebra cada dos sábados.
Brest, al igual que Bretaña entera, es el reino del marisco y la patria de la crepe. Las agitadas aguas del Atlántico constituyen una fuente inagotable de pescado fresco de calidad suprema, especialmente de conchas (fruits de mer). No olvide probar un combinado de cigalas, almejas, berberechos, ostras, mejillones y cangrejo, servido sobre hielo con extraordinarios adobos y mantequilla salada de Bretaña, la mejor del mundo. Platos como los mejillones al vapor (moules à la marinière) o fritos con patatas (moules-frites), vieiras (las célebres Coquilles Saint-Jacques), así como la famosa langosta del Atlántico, son la nave almirante de la gastronomía local. Para probar sabores más tradicionales, disfrute de una suculenta cotriade o godaille (sopa del pescador, la versión bretona de la clásica «bullabesa» -bouillabaisse-).
Deténgase en alguno de los numerosos creperies y quioscos al aire libre de la ciudad para degustar auténticas crepes francesas. No deje de probar las famosas galettes de alforfón de Bretaña (con queso, huevo y jamón) en los bistrós y cafés de la Rue Jean Jaurès y la Place Guérin (centro del barrio estudiantil de St. Martin), acompañadas de la sidra local (cidre). Otra delicia exquisita de la zona, con una tradición de siglos, son las Traou Mad (ricas galletas de mantequilla).
Brest se distingue por su animada vida nocturna, gracias al gran número de estudiantes que viven allí. Siga a la juventud de la ciudad a legendarias salas de conciertos como el Espace Vauban, para asistir a renombradas sesiones de música electrónica y jazz, disfrute relajadamente de una copa en los lounge bar - restaurantes del Port de Commerce y los bares clásicos al comienzo de la Rue de Siam, o conozca el genuino modo de divertirse de los bretones en los atmosféricos locales del puerto, con su característica decoración naval y militar.
Aegean Airlines aterriza en el Aeropuerto Brest Bretagne, situado a 10 kilómetros al nordeste de Brest, en la población de Guipavas de Bretaña. En él encontrará numerosas tiendas duty free y boutiques con artículos de moda, accesorios y regalos, así como tiendas de extraordinarios productos locales inspirados en la tradición naviera de Brest, restaurante, bristró y brasserie, cajeros automáticos y apartados de correos. El Wi-Fi se ofrece sin cargo en todas las dependencias del aeropuerto.
La manera más económica para trasladarse a la ciudad es tomar el Airport Shuttle Bus que le llevará a Porte de Guipavas en 10 minutos. Desde ahí tomará la línea A (Porte de Gouesnou/Porte de Guipavas - Porte de Plouzané) del tranvía al centro de la ciudad (paradas de Place de Strasbourg y Liberté). La distancia desde Porte de Guipavas a la Place de Strasbourg es de unos 10 minutos, y hasta la parada Liberté de 17 minutos. Al estar los trayectos conectados con las salidas/llegadas de los vuelos según la estación, se recomienda comprobar la frecuencia de las salidas y las horas exactas de conexión de tranvía/autobús en www.bibus.fr. De otro modo, puede tomar un taxi.